Acompaña un vídeo que es una maravilla, por su contenido, no tiene efectos especiales ni nada parecido, es un arqueólogo comunicándonos una experiencia, acercándonos el pasado al presente, dándonos el pasado al presente una lección de amor. Es arqueología del amor a través de la historia... ... pero también se puede hacer arqueología del amor en el presente, excavando en la propia persona para poder interpretar en el momento actual bien las cosas. Y, con la arqueología del amor, va la arqueología de la justicia. Hay pilares en la vida que se deben respetar siempre. Veamos lo que dice Benedicto XVI al respecto, que no es más que un comentario al hilo de una reflexión sobre la coyuntura actual y que se resume en una frase de San Agustín.
La grafología es una ciencia que se encarga de estudiar el carácter y la personalidad de un sujeto mediante el análisis e interpretación de su grafía, donde se perciben el movimiento, espacio y formas de los trazos gráficos. La firma es nuestro yo, la expresión de nuestro ser, de nuestra personalidad, nos representa ante los demás y también ante nosotros mismos. La interpretación grafológica de una firma permite conocer aspectos relevantes del autor. Hay que distinguir entre la firma legible, la firma ilegible y la propia rúbrica. La ciencia de la grafología implica un conocimiento sistemático que proporcionará el análisis e interpretación de la firma basado en la identificación y en la evaluación de cada uno de los trazos que la conforman. Comparte con la grafocrítica o pericia o peritación caligráfica el estudio de su dimensión, presión, ubicación, trazos, ritmo y forma. Durante el estudio o proceso de análisis vamos descubriendo los aspectos que característicos y c