En
cuanto al término "Archivística", que hoy día está universalmente aceptado, hasta
hace poco más de 25 años se imponía entre nosotros la denominación de
Archivonomía o Archivología, y aún hoy sigue utilizándose con frecuencia este
último término en Hispanoamérica.
La
palabra Archivística empieza a usarse en la década de los 55-65, aún como un
término de calificación específica, para designar la labor archivística, la
problemática archivística. Es Antonio Matilla Tascón, en España, de los
primeros que lo utilizarán en su "Cartilla de Organización de
Archivos", donde decididamente habla de la Archivística como ciencia
de los archivos, en 1960. Empieza también a cobrar entidad como denominación
de una disciplina en Hispanoamérica, y es la Escuela de Archiveros de
Córdoba (Argentina) y su director Aurelio Tanodi quienes la
promocionan a partir de una colección "Collectanea Archivística", en
donde publicará Tanodi en 1961 su "Manual de Archivología
Hispanoamericana".
Llegamos
así al concepto actual de Archivística, como la ciencia de los archivos
que tendrá como objeto de atención los documentos, en cuanto que estos son en
última instancia el producto integrante de los archivos. Por tanto, la
Archivística se ocupará de la creación, historia, organización y servicio de
los documentos a la administración y a la Historia, en definitiva a la
sociedad.
Tras
establecer esta definición, necesitaremos una primera delimitación, pues el
documento es también objeto de atención por parte de otras ciencias como la
Diplomática, la Sigilografía, la Historia, la Paleografía. La diferencia entre
estas disciplinas es que estudian diferentes aspectos del documento.
Si la Diplomática
estudia el documento en sí mismo, uno a uno, estableciendo su formulario, sus
cláusulas, su tipología; la Paleografía analiza tan sólo los caracteres
gráficos, su escritura; a la Historia le interesa su contenido, la
información que de la lectura del documento se pueda obtener; a la Sigilografía
le interesa el documento en cuanto a su circunstancia validativa, el sello; por
último, la Archivística considerará a todos los documentos formando un
conjunto estructurado procedente de una institución. Se puede definir la
Archivística como la ciencia que estudia la naturaleza de los archivos, los
principios de su conservación y organización, y los medios para su utilización.
Nacimiento de la Archivística.-
Contrasta
a simple vista la remota existencia de los archivos -e incluso de las personas
que se han ocupado de su custodia_, con el tardío nacimiento de una disciplina
que teniéndolos como objeto establece una metodología propia de acuerdo a la
formulación de unos principios aceptados con generalidad y comunicados a través
de un lenguaje propio basado en una terminología específica.
La
Archivística es una disciplina relativamente moderna y con el nombre de
Archivología nace en el siglo XIX como una técnica empírica para arreglo y
conservación de los archivos. Pero su configuración como disciplina
independiente y su consideración como ciencia auxiliar de la Historia es
bastante reciente. El despegue de la Archivística moderna tiene mucho que ver
con la difusión del Manual de los archiveros holandeses Muller, Feith y Fruin,
editado en 1898 y traducido por Arthur J. Leavitt en 1940: “Manual for the
arrangement and description of Archives
y vuelto a traducir después a varios idiomas.